Hola soy Carlos Tadeo y os voy a hablar de Estepa y el Cerro de San Cristobal.
La Estepa actual, con título de ciudad desde 1886 y declarada Conjunto
Histórico-Artístico en 1965, desarrolla su actividad económica –aceite,
mantecados– en un entorno urbano privilegiado. La ciudad cubre toda la
ladera norte del cerro de San Cristóbal y sus casas son muestra de los
recursos que la tradición ha ido incorporando a su cultura edilicia. El
color, la textura, son los de la cal y la piedra caliza, herederos de
aquella cantería estepeña que dejó su impronta en gran parte de la
Andalucía artística del siglo XVIII.
Cerro de San Cristobal.
El Cerro de San Cristobal se encuentra en la localidad sevillana de Estepa, en su parte más alta, desde donde se pueden observar unas impresionantes vistas del entorno.
Es obligada la visita a este lugar, aquí podremos visitar la Iglesia de Santa Mária la Mayor, Castillos y Murallas, el Convento de Santa Clara, el Convento de San Francisco, el Parque Francisco Ayala así como disfrutar de unas bonitas panorámicas del pueblo de Estepa.
La situación geográfica del Cerro de San Cristobal, en una posición
prominente dominando la campiña circundante y el paso entre el valle del
Guadalquivir y la costa mediterránea, hizo que estuviera habitado desde
muy antiguo.
Las excavaciones arqueológicas realizadas en diferentes partes del
cerro han permitido datar varias fases en su proceso de ocupación: Un
primer momento, correspondiente a los siglos IX VIII a.C., es el periodo
tartesico precolonial. Características suyas son las cabañas circulares
de piedra trabada con barro y techo de ramajes, así como la cerámica
hecha a mano.
A partir del siglo VIII a.C. se observa un paulatino aumento de las
influencias de las colonias fenicias establecidas sobre todo en Cádiz y
en la costa mediterránea, es el periodo orientalizante, cuya
manifestación mas característica es la cerámica: poco a poco se va
imponiendo el torno y un mayor refinamiento decorativo, además, se
observa un cambio en los usos constructivos. Este periodo dura hasta el
siglo VI a.C.
A partir de este momento, y hasta la llegada de los romanos, entramos
en el periodo ibérico en el que desaparece la factura manual de la
cerámica.
Algunas fuentes identifican a la ciudad de Estepa con la legendaria
Astapa, que prefirió la autoinmolación a caer bajo el dominio romano.
El desembarco romano en el valle del Guadalquivir se produjo en el
siglo III a.c. como consecuencia de la segunda guerra púnica, tras la
cual se produjo un cambio hegemónico de Cartago a Roma.
Se suele identificar a Estepa con la ciudad romana de Ostippo, perteneciente al convento jurídico de Astigi (Ecija).
Bien comunicada y dominando la fértil campiña circundante, existen
datos documentales que demuestran una relativa importancia de esta
ciudad: la declaración por parte de Roma como Ciudad Libre revela una
cierta independencia, así como su posterior conversión en municipio con
leyes propias.
De acuerdo con los datos recogidos en las excavaciones arqueológicas
realizadas hasta la fecha, sabemos que la ciudad de Ostippo rebasó en
esta época el estricto recinto del cerro, pues se han encontrado restos
de edificaciones urbanas tanto en el cerro como en el actual casco
urbano de Estepa (falda del mismo), aún desconociéndose su perímetro
exacto y su ordenación urbana.
En el periodo de tiempo que va desde el año 711, llegada de los
musulmanes a la península, hasta el año 1241, año de la toma de Estepa
por Fernando III, el antiguo municipio romano se vería reducido a un
castillo de gran valor estratégico dependiente, según el momento
histórico, de Ecija, Granada, Sevilla o Córdoba.
De nombre Hins Jstabba, no debe, sin embargo, ser entendido como un
simple castillo sino como villa o recinto fortificado bajo las ordenes
de un administrador que servia como refugio a toda la comarca
circundante (Distrito Castral) formada, además de el castillo de
Alhonoz, por los actuales términos municipales de Estepa, Gilena,
Pedrera y Aguadulce.
Nuevamente vuelven a ser muy escasos los restos materiales de este
momento histórico, probablemente, el recinto fortificado debió de
coincidir prácticamente con el recinto amurallado posterior que se
conserva estando, por tanto, restringida la ocupación a la cota mas
elevada del cerro, la Mezquita Mayor con la actual Iglesia de Santa
Maria, en la que se conservan vestigios y el castillo con las ruinas del
actual (a excepción de la torre del homenaje, ya de época cristiana).
Aqui os dejo dos enlaces.
Estepa
Cerro de San Cristobal
Carlos Tadeo
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